
Las drogas afectan de forma directa al sistema nervioso central. Sustancias capaces de crear un auténtico problema a nivel físico, social y laboral de las que, para salir es importante contar con la ayuda de un centro de adicciones. Aquí queremos explicar cómo actúan en el cerebro y cuáles son las mejores alternativas a la hora de recibir ayuda.
El efecto de las drogas sobre nuestro cerebro
Muchas personas se preguntan por qué las drogas son capaces de crear adicciones en muy poco tiempo y los estímulos naturales no, aunque resulten placenteros. Esto es algo que podemos ilustrar con un ejemplo. Para el cerebro, a nivel de efectos, escuchar música relajante es como recibir un susurro en el oído.
Sin embargo, las drogas no tienen nada que ver con un susurro. Más bien, los efectos que producen son más parecidos a recibir un grito a través de un megáfono a pocos centímetros de distancia. Se trata de estímulos muy potentes que generan una reacción en cadena.
El sistema nervioso central, la clave principal
Todas las drogas tienen efectos sobre el sistema nervioso central. Esta es la parte del cerebro responsable de regular la forma en la que pensamos, sentimos y actuamos. Una zona muy compleja en la cual estas sustancias pueden penetrar sin dificultad.
Los efectos son inmediatos y a los pocos minutos de haber consumido la sustancia, el sistema nervioso central se ve alterado. Pero ¿cómo? El funcionamiento de los neurotransmisores se ve alterado, lo que incluso puede llegar a modificar la forma en la que percibimos la realidad.
Esto también tiene efectos sobre nuestra forma de pensar y de actuar. Sin embargo, suelen remitir al cabo de pocos minutos u horas. El problema viene después, cuando el consumo se realiza de forma repetida y sostenida en el tiempo, el cerebro siente la necesidad de obtener esa sustancia para seguir funcionando. Es ahí cuando entra en juego la adicción.
Entonces es cuando el problema se vuelve mucho más grave. El síndrome de abstinencia puede provocar que cambiemos definitivamente nuestra forma de ser, ya que esos neurotransmisores del sistema nervioso central no son capaces de funcionar correctamente.
El síndrome de abstinencia puede llegar a que la persona dé prioridad absoluta a satisfacer su adicción. Algo que suele traducirse en problemas económicos, sociales y familiares. Llegados a este punto, un centro de desintoxicación puede ser de máxima ayuda, que con un equipo multidisciplinar pautará los tratamientos más adecuados a cada tipo de paciente.
Tipos de drogas y cómo actúan en nuestro cerebro
Evidentemente, no todas las drogas actúan igual sobre nuestro cerebro. Los expertos coinciden en señalar que, a grandes rasgos, pueden dividirse en tres categorías:
- Drogas que deprimen el sistema nervioso central. Es el caso de la heroína, el alcohol o cualquier derivado del opio. El efecto que persiguen es desactivar a los neurotransmisores responsables de mantener el estado de vigilia del sujeto. Por ello, en pequeñas dosis solo generan relajación y somnolencia. Sin embargo, cuando son altas, pueden provocar sedación o, incluso, un coma.
- Drogas que estimulan el sistema nervioso central. Como la cocaína o las anfetaminas. Tienen el efecto contrario a las anteriores. Es decir, fomentan el trabajo de los neurotransmisores relacionados con el estado de vigilia para generar euforia e incentivar la actividad motriz reduciendo la sensación de hambre y cansancio desembocando en graves problemas para la salud.
- Drogas que perturban el sistema nervioso central. Aquí hablamos del LSD o el cánnabis. Se ocupan de alterar la función de los neurotransmisores relacionados con el estado emocional, la organización del pensamiento y la percepción de la realidad.
Un centro de adicciones como solución al problema
Cualquiera de esas drogas tiene la facultad de crear dependencia a dos niveles. La primera de ellas es la física, que se produce cuando el cuerpo se acostumbra a la sustancia y exige a la persona que la consuma. El síndrome de abstinencia es el mejor ejemplo de los efectos que pueden llegar a provocar en este sentido.
La otra dependencia se produce a nivel psicológico. En concreto, hablamos del impulso psíquico que exige el consumo regular de la sustancia para generar el placer derivado de ella.
Ambos tipos de dependencias suelen aparecer a la vez. Y, cuando lo hacen, resulta difícil superarlas y el riesgo de recaída es alto sin la ayuda adecuada. Por ellos, un centro de desintoxicación se antoja fundamental para atajar el problema.
Centro Elphis, un lugar de desintoxicación efectivo para superar las adicciones
El Modelo Elphis que ponemos en práctica en nuestro centro es extremadamente efectivo y, además, uno de los más reconocidos entre los usuarios que nos han visitado. Se trata de un tratamiento cognitivo-conductual combinado con estrategias de intervención que se han mostrado eficaces en multitud de estudios y en la práctica. Para aplicarlo, contamos con un equipo multidisciplinar formado por magníficos profesionales capaces de aplicar estrategias personalizadas sobre cualquier paciente con un problema de adicción.
Además, no solo trabajamos sobre la propia persona, sino que también lo hacemos sobre sus familiares, amigos y entorno en general. Poniendo a su disposición una atención a familiares. ¿Su objetivo? Ayudarles a superar momentos especialmente vulnerables y evitar recaídas.
En definitiva, los efectos de las drogas sobre el cerebro son tan fuertes que, en muy poco tiempo, pueden generar adicción y cambios profundos en la personalidad. Llegados a ese punto, la solución realmente efectiva pasa por recurrir a los servicios de desintoxicación y deshabituación de un centro de adicciones como Centro Elphis. Solo en base a la aplicación del método adecuado es posible lograr que la persona vuelva a sentirse bien y a disfrutar de una vida completamente normal